Ha sido una posición bien firme e inquebrantable, el apoyo irrestricto por parte de quien les escribe, a la exitosa política de seguridad democrática del gobierno colombiano. Digan lo que digan quienes se oponen al gobierno de Álvaro Uribe Vélez, y a los estoicos y heroicos esfuerzos de nuestras Fuerzas Armadas legítimamente constituidas, esa política ha dado golpes contundentes contra muchos de los terroristas y cabecillas de los grupos armados al margen de la ley, y principalmente en contra de los líderes y mandos medios de la guerrilla de las Farc y de las Auc. Sin embargo hay algunas actitudes ambiguas en esa lucha contra el crimen organizado, que debieran corregirse.
Algunas de esas pocas actitudes cuestionables se relacionan con la política de recompensas. Hasta ahora, toda la política había tenido un asidero de legitimidad incuestionable, por cuanto se trataba de impulsar a los criminales a que se delaten entre sí, o se sometieran a la justicia obteniendo algunos beneficios jurídicos y/o económicos según el caso, o que personas que por diversas circunstancias están al tanto de informaciones claves para la estrategia militar y policial, suministraran dicha información a las autoridades a cambio de un dinero y de la protección de su identidad y/o relocalización geográfica mediante algún programa tipo “Protección de testigos”. Bajo ese esquema se han obtenido valiosas informaciones, que han conllevado no sólo a los archiconocidos escándalos de la "parapolítica" y la "farcpolítica", sino que también han redundado en la neutralización de peligrosos criminales de manera legítima -si bien polémica en opinión de algunos-. Así han sido dado de baja siniestros enemigos del orden público, tales como alias Iván Ríos y alias Raúl Reyes, entre muchos otros.
Sin embargo, ahora el Ejército Nacional está ofreciendo 5.000 millones de pesos, algo más de 2 millones de dólares, por el cadáver del extinto alias Manuel Marulanda Tirofijo. Es entendible el valor simbólico que pudiere tener la prueba física de esta muerte, anunciada mundialmente con bombos y platillos por diversos medios de comunicación. Sin duda alguna, el alto mando castrense tiene buenas intenciones al querer exponer la muerte de alias Tirofijo como una realidad "recontra-confirmada", y para darle un golpe desmoralizador a este grupo terrorista, y a los muchos políticos protagonistas de la vida pública nacional e internacional que apoyan a la guerrilla, como parecen demostrarlo los archivos hallados en los PC’s de alias Raúl Reyes. Pero se trata de un cadáver, nada más, por simbólico que este sea.
Mientras tanto las autoridades de la capital ofrecen 10 millones de pesos, algo más de 5.000 dólares, por información que permita localizar y rescatar a un bebé secuestrado el día de hoy en Bogotá. El menor fue raptado dentro del propio apartamento de su madre. Claro es que la vida no tiene precio, pero no deja de ser exótico que la “tarifa” para el cadáver del deplorable criminal y asesino del tal alias Tirofijo valga mucho más para las autoridades, que la recompensa ofrecida para lograr obtener información que permita rescatar un niño sustraído de manera violenta, aunque con vida -hasta donde se sabe-, del hogar de su progenitora. Sea éste un llamado respetuoso y cordial de atención a nuestras autoridades, no una de esas críticas insensatas y superfluas de políticos inescrupulosos de la oposición contra nuestros militares y policías, quienes arriesgan su pellejo para darnos la paz y la libertad, y cuya tarea merece el más alto reconocimiento y apoyo por parte de nosotros los ciudadanos. Pero no le hagamos el juego a la delincuencia común, capaz de ser tan vil, asesina e inhumana, como los grupos armados ilegales que esperamos sean erradicados y desterrados por siempre de nuestra amada patria, junto a la delincuencia común, claro está. THL
ACTUALIZACIÓN 18+30: EL TIEMPO: 'Revelan retrato hablado de hombre acusado de secuestrar a bebé de 22 meses en el norte de Bogotá'.
ACTUALIZACIÓN 23+00: EL ESPECTADOR: 'Secuestradores piden rescate por Joel Paolo, niño raptado en Bogotá'.
ACTUALIZACIÓN 29/05/08: RCN: 'Rescatado el niño Joel Paolo Pinto en Bogotá' - "Las autoridades rescataron sano y salvo al niño Joel Paolo Pinto (en la foto), quien había sido secuestrado en Bogotá, y detuvieron a cuatro presuntos secuestradores. La noticia fue confirmada en RCN por el coronel Humberto Guatibonza, director del Gaula de la Policía".
ACTUALIZACIÓN 29/05/08: EL TIEMPO: 'Una interceptación telefónica fue clave para rescate de bebé de 22 meses secuestrado'.
ACTUALIZACIÓN 31/05/08: EL ESPECTADOR: 'Investigan si secuestro de Joel Paolo lo planeó un familiar'.
miércoles, mayo 28, 2008
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6 comentarios:
Muy buen artículo.en mi país El Salvador las noticias sobre Colombia estan inundando los medios de comunicación, en parte porque políticos locales han salido involucrados en las famosas caomputadoras de raul Reyes. En mi blog hay un artículo al respecto
Te invito a ti y a tus amables lectores a verlo en
http://neck.vox.com/library/post/d%C3%ADas-de-trueno.html
Hola Net: Que muy agradecido con su visita y comentario a mi blog, y sorprendido por la extensión de los tentáculos de estos líos de los PC's de alias Raúl Reyes, que han llegado hasta El Salvador, por lo visto. Por otra parte, es interesante señalar los grandes parecidos que hay entre nuestros países, sus problemas, si bien también sus costumbres y economía, hasta en lo de ser grandes productores y consumidores de café. Un saludo desde Bogota.
NOTA: Traté de dejar este comentario en su artículo titulado "Días de trueno", pero no soy socio de VOX.
Esta interesante su blog, quisiera ponerme en contacto con ud para asociar contenido y de pronto mas. Contacteme, camilosanchez46@gmail.com
Camilo Sánchez: Muchas gracias por su amable comentario.
Cierto, Thilo, hay algo de triunfalismo en la actitud del Ejército con eso de pagar por el cadáver de Tirofijo. Ya está bueno con su deceso.
Eso de la política de recompensas tiene sentido. Lo de las películas es verdad, con los caza-recompensas. Si no estoy, hubo un reality con un caza recompensa que tenía una melena plateada y larga en la parte de atrás, y se vestía de negro. Cazó a varios delincuentes en durante el programa. Esa práctica es bastante incipiente en Colombia, y tiene algo de tenebroso. Y lo que resulta es que cada bandido tiene un precio. Eso sirve para el ranking entre los delincuentes. Otorga status una mayor recompensa.
De nuevo, la vida es sagrada, y los secuestradores deben tener máximas condenas, tanto como los asesinos.
Abrazo.
Hola Julio: Pues si estamos un poco como en el viejo oeste norteamericano..., pero funciona, supone uno. Eso sí, pagar por un cadáver de un personaje de estos..., sería diferente obviamente si estuviera vivo, y si se tratara de neutralizarlo y/o capturarlo para que revele informaciones estratégicas, y para presionar la entrega de los secuestrados, que hoy por hoy, hacen las veces de escudos humanos para los comandantes sobrevivientes de la guerrilla. Razón esta última por lo que dudo mucho que sean liberados los de "alto perfil", como la Betancourt..., el día que eso pase, será porque negociarán su rendición pero a cambio de volverse ciudadanos "honorables" en alguna mal llamada república bolivariana -si Bolívar supiera las cosas que hacen algunos supuestamente en su honor-, o en el supuesto país creador de las libertades y las tolerancias políticas, o sea, Francia..., y lograrán evadir el castigo que les corresponde. Pero si ello sirve a la justicia para el bueno, como lo expresara en otras palabras el Coronel Mendieta, quizás en ese caso termine cediendo el gobierno, siempre en cuando quede desmantelado este grupo terrorista. Esa pareciera ser la perspectiva, aunque resulta también que la Corte Internacional de Justicia tendría que exigir su enjuiciamiento por delitos de lesa humanidad, si son consecuentes, y ahí sí habría justicia..., pero no estoy seguro de qué tanto está politizada esta organización jurídica supranacional...
Un abrazo también, THL.
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