viernes, septiembre 28, 2007

Los soñadores también pueden triunfar

No conozco a ninguno de los siguientes personajes personalmente. Pero si me lo preguntaran, tendría que empezar por decir que se trata de dos personas de carácter quijotesco, empeñadas en soñar con un mundo mejor. Soñadores sensatos, quizás, porque si bien en sus letras se percibe el anhelo y la esperanza de que algún día nuestro mundo podría cambiar para bien –para variar-, no son de los que utilizan gafas de sol de color rosado para negar algunas verdades apabullantes de lo mal que está la especie humana, en muchos aspectos concernientes a la paz o la utopía de la convivencia armónica entre diferentes formas de pensar y de ver el mundo.


Pero además el mundo es multicolor, en su versión natural y sin filtros artificiales. Bueno, al menos el mundo auténtico, no aquel que nos tratan de vender en las telenovelas y enlatados de la TV, o en algunos medios masivos de comunicación. En medio del ruido apabullante de los que tratan de imponerse por el volumen de su voz, surgen quienes saben escuchar en silencio. También hay quienes tratan de encontrar la ruta que conecta los senderos del pasado, presente y futuro de Latinoamérica, como si poseyeran un instrumento mágico de navegación, diseñado por ellos mismos. Algo así como un Astrolabio.


Pretendo por medio de estas simples letras, felicitar a Julio Suárez Anturi y a Mauricio Duque Arrubla, cuyos textos han sido seleccionados por el jurado de la convocatoria literaria Bogotá por Bogotá. Se trata de una iniciativa que hace parte de la gran fiesta, que es el gran honor concedido a Bogotá cuando fue elegida Capital Mundial del Libro por la UNESCO para el 2007. Todo el que quisiera, podía participar en una convocatoria abierta a todo el mundo, sin distingos de clase, edad, nacionalidad, sexo o religión. La única condición era que los textos tuvieren que ver con anécdotas e historias sobre Bogotá, y que fueran auténticos, por supuesto.

La UNESCO eligió a Bogotá por un esfuerzo gubernamental sostenido en promover la cultura, y hacerla más democrática, llevándola a recónditos lugares de la capital donde era un artículo de lujo. Por eso se construyeron grandes y bellas bibliotecas en lugares poco privilegiados. También se organizaron eventos gratuitos de música y teatro, y se ha logrado llevar el acceso a la educación primaria a prácticamente el 100% de la población capitalina. Ha sido el producto del esfuerzo sostenido de varias gestiones administrativas continuadas, que incluyen a políticos de diversas tendencias ideológicas, como Antanas Mockus, Enrique Peñalosa y Luis Eduardo Garzón.

De la misma manera, se ha premiado el esfuerzo, la constancia y calidad literaria de estos bloggers colombianos, y los demás autores cuyos textos han sido seleccionados para la versión final del libro de Bogotá por Bogotá del Fondo de Promoción para la Cultura. Quizás muy demorada la convocatoria, y algo desorganizada, pues creo que no cumplió con uno sólo de los pasos señalados por ellos mismos en su propio cronograma. Pero la parte más importante, la del jurado y la selección final de textos fue realizada de manera abierta, pública y democrática, por lo que el fallo de esta convocatoria, más que inapelable, es sin duda justo. Y lo más importante, los soñadores también pueden triunfar.